lunes, 9 de septiembre de 2019


La esencia de la técnica moderna. Una breve reflexión sobre la obra de Martín Heidegger: La cuestión de la técnica (Die Frage nach der Technik)

Esta pequeña reflexión no busca ahondar en la problemática de la técnica moderna, sino más bien, pretende indicar algunas advertencias de su evolución a partir de la obra del filósofo alemán Martín Heidegger. La evolución tecnológica no es solo un mero resultado de miles de investigaciones, sino más bien, obedece al destino de la humanidad. ¿Por qué destino? ¿Tiene algo que ver el destino de la técnica con el hombre?  ¿No atenta el destino contra la libertad del hombre?
La técnica (tecnh) tiene en general dos acepciones: a) “La técnica es un medio para un fin”, b) “La técnica es un hacer del hombre”[1]. Estas connotaciones son correctas y verdaderas, pero, la cuestión que Heidegger se plantea es, si la técnica es meramente “instrumento” o no y, si no fuera un simple instrumento, pues, ¿qué será? 
La técnica no se reduce en lo correcto ni en lo verdadero como un existente que está en la luz y a disposición del hombre, sino está vinculada con el des-ocultar. Lo des-ocultado es lo verdadero, por lo tanto, la verdad de la técnica consiste en sacar lo real de su estado oculto a lo des-oculto. La técnica debe ser aprehendida desde su esencia; la concepción instrumental de la técnica no manifiesta su esencia; ésta se revela a partir de la verdad. Heidegger dice en este sentido, que “lo meramente «manifiesto» no es aún lo verdadero”[2]. Este pensador esclarece, a partir del pensamiento de Aristóteles, el origen y el sentido de la técnica como instrumento. La palabra griega aitia (aitia), que equivale a causa en la lengua romance y a Ursache en la lengua alemana, tiene el sentido de aquello “que es responsable de algo”[3]. Bajo esta perspectiva Heidegger interpreta las cuatro causas aristotélicas: material, formal, fin y eficiente (ulh, eidoV, teloV kai legein). En cada instrumento están imbricadas las cuatro causas. Éstas son responsables, por ejemplo, que este celular esté aquí y se me done como un instrumento poli-funcional. Las cuatro causas “dejan venir lo todavía no presente a la presencia”[4]. La concepción griega de la causa permite comprender la esencia de la técnica, pero esta no se debe buscar en un existente, que ya está presente (como este notebook que tengo ante mí), sino más bien, su esencia se debe descubrir en aquellas realidades, que aún no han llegado a la luz, pero, que posiblemente aparecerá. Al respecto Heidegger trae a colación una frase del Symposium de Platón: “Todo dar-lugar-a que algo (cualquiera que sea) vaya y proceda desde lo no-presente a la presencia, es poihsiV, es pro-ducir”[5]. El dar-lugar-a des-oculta algo a través del producir (poihsiV). Este producir hay que entender bajo dos sentidos fundamentales:
a) La naturaleza (jusiV ) hace frotar desde sí misma la vida. En este sentido la naturaleza (jusiV ) es un producir (poihsiV). La naturaleza lleva en sí (en eautw) la potencialidad de hacer brotar la flor.
b) Por el contrario, lo que viene producido por la acción propiamente humana (por ejemplo, una silla o una computadora) es también un producir (poihsiV), pero este producir es en otro (en allw).
Tanto el dar-lugar-a de la naturaleza como el de la acción humana guardan una estrecha relación con el producir (poihsiV). “El pro-ducir acontece solamente cuando llega lo velado a lo desvelado”[6]. Lo desvelado es lo que los griegos concebían como aletheia (aleqeia), concepto que ha sido asumido en la tradición filosófica como verdad (veritas). En el brotar viene a la luz el germinar de las semillas, porque se des-oculta en el mismo producir. Heidegger se pregunta: “¿Qué tiene que ver la técnica con el des-ocultar? Respuesta: Todo. Pues, en el des-ocultar se funda todo producir”[7]. Estando así, la técnica no es un simple medio, o sea un instrumento, sino ella es, en cuanto saca algo de lo oculto, des-ocultar[8].
La técnica tal como es indicada hasta aquí, es un producir (poihsiV), pero su significado no se reduce a un mero producir artesanal, sino también se relaciona con el conocimiento. “La palabratecnh está unidad, desde los comienzo hasta el pensar de Platón a la palabra episthmh[9]. Estando así, cuando pensamos en la técnica, se debe tener presente estas significaciones: Producir y conocer. Estos le son inherentes. El conocimiento es el que crea las condiciones para el producir artesano, incita a descubrir y sacar a luz entes (existentes). Heidegger expresa, en este sentido, que “el conocer abre. En cuanto abriente, es un des-ocultar[…]. La técnica es un modo del aleqeuein[10]. Vale decir, la técnica permite que el ser del ente aparezca y desaparezca, se des-oculte y se oculte, se revele y se vele.
Con esto hemos disipado el sentido de la técnica para el mundo griego, pero, la pregunta es: ¿Vale también la concepción griega de la técnica para la “técnica moderna”? Si bien es cierto, que la concepción griega de la técnica está en la base de la técnica moderna, sin embargo, la esencia de la técnica moderna no es un mero producir (poihsiV), sino, más bien, es un provocar.

La técnica moderna no se despliega en un pro-ducir en el sentido de poihsiV. El desocultar imperante en la técnica moderna es un provocar que pone a la naturaleza en la exigencia de liberar energías, que en cuanto tales puedan ser explotadas y acumuladas[11].

            Es notable, la diferencia entre el producir artesanal y el producir de la técnica moderna. Por ejemplo: El campesino mueve la tierra para echar sus semillas y luego espera, que la tierra haga germinar la semilla y de fruto. Cultiva y cuida del campo, sin violentarlo; mientras que el producir de la técnica moderna provoca a la naturaleza (producción agrícola mecanizada). Así, el aire, la selva, los ríos, mares y la tierra se transformaron en espacios industriales y comerciales. La naturaleza es obligada dar de sí todo lo que puede. La técnica moderna calcula, descubre, organiza, clasifica, explota, modifica lo que hay en la naturaleza.

El campo es ahora industria motorizada de la alimentación. El aire es puesto dentro de la entrega de nitrógeno, el suelo por los minerales; minerales, por ejemplo, el uranio, éste por la energía atómica, que puede ser desintegrada para destrucción o para usos pacíficos[12].

El provocar a la naturaleza es la nota característica de la técnica moderna. La provocación exige a la naturaleza liberar energías y la naturaleza como respuesta a esta provocación reacciona proporcionando al hombre productos químicos altamente nocivos, sobre todo, el uranio, combustible para producir y “dominar” la energía nuclear.
La esencia de la técnica moderna, esto es la situación histórica de nuestra época, es un horizonte sombrío, tenebroso y fatal; es un viaje, sin viso de un fin feliz, es un camino, sin retorno…, salvo que el hombre recapacite y trate de encontrar una vía disposición exponencial del avance tecnológico. ¿Por qué pintar de este modo el futuro de nuestra era, de la era de nuestra historia, de la era de nuestra tierra? Heidegger (y otros pensadores como Karl Jaspers, Hannah Arendt, Hans Jonas, Albert Einstein, Steven Hawking, Eric Frynjolfsson y McAfee, Klaus Schwab y otros), en este sentido, nos advierte, que “la esencia de la técnica moderna lleva al hombre al camino de aquel desocultar[…]. Poner en un camino quiere decir en alemán schicken (destinar)”[13]. Esto significa, que el hombre des-ocultador técnico es necesariamente provocador. El hombre moderno (Dasein) está destinado a liberar de manera continua y progresiva su hybris (ubriV), a des-ocultar sus potencialidades con el afán de controlar, explotar, dominar y destruir. Sabe que nuestra era está caracterizada por “la bomba atómica”[14]. Los reactores nucleares, cuyas instalaciones están diseminadas por todo el continente[15], son muestras patentes de un peligro real de destrucción masiva.
Desde Nagasaki e Hiroshima, símbolo de la catástrofe más pronunciada de la modernidad, la humanidad está en vilo. La reflexión por “la cuestión de la técnica”, pronunciada por Heidegger en el año 1953, apenas 8 años después de aquel desastre atómico, es apenas una de las tantas que se pronunciaron desde esa época. Pero, hoy día, ¿qué tipo de amenaza existe? ¿No sigue latente las amenazas atómicas? ¿Será que “la segunda era de las maquinas”[16] solo nos proporciona control, eficiencia, confort y sensación de felicidad o…? ¿Proporcionará la “revolución 4.0” más fuente de trabajo y seguridad para el hombre o, más bien, le vulnerará más y más…? ¿Cuál es la prospectiva de nuestra hábitat, o sea de nuestro ecosistema?


Referencia Bibliográfica
Heidegger, M.  La cuestión de la técnica. En Filosofía, ciencia y técnica. Editorial Universitaria. Santiago de Chile. 1997.



[1] Heidegger, M.  La cuestión de la técnica. p. 114.
[2] Ídem. p. 115.
[3] Ídem. p. 117.
[4] Ídem. p. 119.
[5] Ídem. p. 119.
[6] Ídem. p. 120.
[7] Ídem. p. 120.
[8] Cfr. Ídem. p. 121.
[9] Ídem. p. 121.
[10] Ídem. p. 121.
[11] Ídem. p. 123.
[12] Ídem. pp. 123-124.
[13] Ídem. p. 134.
[14] Heidegger, M. Serenidad. P. 4.
[15] Cfr. Organización Internacional de Energías Nucleares (OIEN).
[16] Corresponde a Erik Frynjolfsson y Andrew MaAffe son profesores de Massachusetts Institute Technology, que publicaron en el 2014 un libro, cuyo título: “The Second Machine Age”. Este libro inspiró a Klaus Schwab, fundador y presidente del Foro Económico Mundial, para escribir el libro: “The Fourth Industrial Revolution”, que fue publicado en el 2016.  

martes, 1 de septiembre de 2015

Liderazgo Transformacional: Una propuesta desafiante para los paraguayos



Liderazgo Transformacional: Una propuesta desafiante para los paraguayos
Síntesis de la conferencia de John Maxwell en el Teatro del Banco Central del Paraguay (1/09/15)

            John Maxwell es un líder influyente en el mundo occidental, pues ha escrito muchos libros sobre liderazgo y valores. Estos días está por el Paraguay y hoy dictó una conferencia dirigida a educadores. Comparto con agrado esta síntesis con ustedes: colegas, amigos y educadores de la gran familia de la Universidad Tecnológica Intercontinental (UTIC).
Motivación: Regla de cinco. Un hombre tenía un hacha bien afilada, pero nunca había usado. Un día decidió cortar con ella un árbol, que se hallaba al costado de su casa. Inició dándole al árbol cinco hachazos, luego guardó su filosa hacha. Al día siguiente volvió a tomar su hacha y nuevamente dio cinco hachazos al árbol. Y así todos los días el dueño del árbol procedió hasta que un día el árbol terminó tendido en el suelo.
            Moraleja: ¡Alcanzar el objetivo propuesto! Los instrumentos de trabajo son importantes, sin embargo la persistencia en la meta es, quizá, mucho más significativa. El tamaño del árbol corresponde al tamaño de tus sueños o a la dimensión de tus pretensiones. Confía en ti mismo y persiste sobre aquello que pretendes, sobre aquello que quieres lograr.
            ¿Cómo se puede lograr el liderazgo en el Paraguay? La respuesta es la siguiente: Conseguir un buen instrumento como el hacha y persistir en la acción de derribar el árbol. Los instrumentos adecuados o pertinentes no pueden ser otra cosa que los valores, que se asumen en la vida y se determinan en cada momento y en cada lugar.
            John Maxwell afirma que el líder debe tener una «vida significativa», la cual se caracteriza por un agregado especial, el valor. Vida significativa no tiene otro sentido más que agregar valor a la vida. En este sentido él habla de una «vida intencional». Ésta viene caracterizada por aquel valor agregado. De ahí que una vida, que es vivida y asumida intencionalmente, se contrapone a una vida egoísta. El egoísta está atrapado en sí mismo. No puede trascender y, por consecuencia, no puede ir más allá de su pequeña circunferencia mezquina, por eso esa vida egoísta es solitaria, triste y propensa a ser dañina. La vida significativa siempre está dispuesta a salirse de sí misma y está siempre alerta a las necesidades de los demás.
            De hecho, nadie está exento del egoísmo, pues todos somos egoístas. Este egoísmo debe ser domado, es decir dominado por cada persona. El egoísmo debe ser controlado. El auténtico líder tiene controlado su egoísmo, porque sus esfuerzos no se dirigen en hacer que las personas giren en torno a él mismo y se valga de ellas, sino, más bien, les motiva para que tengan también una vida intencional o cargada de valores. El líder motiva,  estima y ama a los demás, busca el bien de los otros. 
            Ser educador es la profesión más privilegiada. El educador ya tiene una vida significativa, pues ya tiene valores asidos y vividos, por lo tanto, ya se ha constituido en un líder, porque él influye positivamente en sus estudiantes.
            Nosotros lograremos instalar el liderazgo en el Paraguay, toda vez que seamos capaces de valorar a nuestros compatriotas, toda vez que les estimemos y les alentemos para apropiarse de los valores y convertir su existencia en vida significativa. Si no valoramos a los demás, pues no lograremos la autoestima; y si el líder no logra la autoestima de los demás, ese simplemente no es un líder, puesto que no agrega valor en la vida de los demás. La misión principal del líder es levantar la vida de los demás con estima y amor.
            ¿Qué puedo hacer yo hoy para ayudar a mis compatriotas a levantar su autoestima? Desde la profesión, o sea desde la condición de ser educador, se puede hacer muchísimo. El educador es como aquella hacha afilada, que puede derribar el árbol, es decir un árbol de una vida egoísta y carente de significación, y tiene toda la posibilidad de transformar esa vida en vida intencional. Si el docente cumple su rol de líder, pues se podría soñar un Paraguay transformado, en el que se podría vivir entre gente valorada, estimada y amada.
            El educador tiene una función diferenciada respecto a las demás personas. Pues el educador debe erguir la cabeza de sus estudiantes, levantarles y mostrarles un horizonte de hermandad; los demás, sin embargo, no han tenido experiencia de una vida significativa, por eso sólo buscan menoscabar, desestimar y hundir a las personas. En otras palabras no agregan valor a la vida, sino, por el contrario, dispersan y desparraman.
            ¿A quién o a qué vida yo agregué valor? ¿Ayudé a alguien en estos últimos tiempos a obtener una vida significativa? Si queremos transformar el Paraguay, pues, entonces, debemos ser personas intencionales.
            ¿Cuál es lo esencial para la transformación del Paraguay? Se debe crear un «movimiento transformacional». ¿Cuáles son sus características? El líder debe influenciar en los demás. Esta influencia, por un lado, no se da de abajo hacia arriba, sino de arriba para abajo. La transformación no inicia de la gente, o de un fulano impersonal, sino comienza desde mí mismo. El cambio transformacional empieza conmigo y contigo. Aquí se involucra un «Yo» y un «tú».  La transformación del Paraguay debe partir de un nosotros comprometidos con los valores, con la vida significativa. Por otro lado, la transformación surge desde dentro de uno mismo, o sea de la interioridad de cada persona, y se proyecta hacia fuera, hacia los demás. El movimiento transformacional siempre se origina con un puñado de gente, no con la masa. Siempre germina entre pocas personas, que comparten un mismo sueño y tratan ponerlos en prácticas. Ejemplo, el movimiento transformacional de Mahatma Gandhi.
            El movimiento transformacional no pretende influenciar en la masa, sino en personas concretas quienes, a su vez, tienen la posibilidad de influenciar en otros. ¡Elige influenciar en personas adecuadas!
            ¿Cuál es la característica de un líder transformacional? 1. El líder transformacional ve las cosas que otros no ven. Los otros generalmente no ven más allá de la rutina de la cotidianeidad, mientras el líder alza su vista hacia lo fundamental, trasciende lo cotidiano y percibe otro horizonte. 2. El líder ve posibilidades, que otros no ven. Posibilidades positivas, pero, a su vez, negativas. Trata de abrir el panorama a los demás y encaminarles hacia una vida intencional. 3. El líder siempre encuentra una salida a los obstáculos, una solución a los problemas, una respuesta satisfactoria a las preguntas. 4. El líder expresa cosas, que los demás no dicen. El líder es espontáneo y franco, pues dice lo que piensa y lo que siente. Ejemplo: Martín Luther King, quien se había parado ante la muchedumbre para expresar lo siguiente: «Yo tengo un sueño». 5. El líder cree cosas que los demás no creen. 6. El líder transformador desafía.
            La gente no sigue a las personas, que tienen muchos diplomas y títulos, va detrás de líderes comprometidos con los valores, líderes valientes y corajudos.
            La gente es capaz de leer la historia de su vida, puede retroceder con sus recuerdos en el pasado y describir algunos acontecimientos importantes, que vivió; mientras que el líder no lee su historia, sino escribe su propia historia. La vida del líder es como un «libro sin escribir», un «libro» de hojas blancas, en el cual debe ser proyectada la vida. El líder debe tomar las riendas de su vida y conducirla cada vez más hacia la luz de los valores, por eso el líder transformador marca la diferencia. Marca la diferencia con otros, quienes también se distinguen de los demás. El líder transformador busca alianza con otros líderes y en equipo busca transformar el contexto. El educador por su propia naturaleza ya marca la diferencia.
¿Creo que mi vida es significativa? ¿Puedo considerar mi vida como intencional? ¿Estamos dispuestos soñar con una trasformación personal? ¿Siento una gran estima hacia mí mismo? ¿Soy capaz de introyectar significación a la vida de los que me rodean? ¿Cuál es mi influencia en mi entorno?

lunes, 8 de diciembre de 2014

DESAFÍOS MÁS RELEVANTES DE LA UNIVERSIDD LATINOAMERICANA Y PARAGUAYA



Desafíos más relevantes de la Universidad latinoamericana y paraguaya 

Un país no puede descuidar ni debilitar su educación superior […], sin correr el riesgo de debilitar su propia "inteligencia nacional" y sus posibilidades de mantener e incrementar sus contactos con la comunidad científica e intelectual del mundo ni disponer de las capacidades y conocimientos que necesita para hacerse cargo de modo independiente de su propio desarrollo. Tünnermann Bernheim.

1. Igualdad social

La brecha entre ricos y pobres sigue creciendo de manera desproporcionada, los bienes globales son manejados y controlados por un pequeño grupo.  Esta situación genera inmediatamente exclusión social, aumento de desempleados y, por ende, crece la inseguridad social, la violencia y la población en general está expuesta a todo tipo de adicciones. Las Instituciones de Educación  Superior tienen un gran compromiso ante estas realidades socio-económicas, pues ellas pueden ayudar a aplanar esos impactos con nuevas propuestas y nuevos métodos de Enseñanzas y Aprendizajes. La Academia debe asumir el liderazgo de cambio y de transformación social en aras de promover la equidad social y el mejoramiento de la calidad de vida de su entorno inmediato. Ella debe constituirse en fuente de inspiración y orientación de la justicia.

2. La globalización

La globalización es un fenómeno, que está estimulada y alimentada por la economía de mercado neoliberal. Ejerce influencia en la sociedad y acelera los cambios en las organizaciones e instituciones. Instala pautas y nuevos hábitos en la sociedad. El consumismo es uno de ellos. La globalización exacerba el deseo consumista del hombre y crea necesidades. La globalización exige replantear las propuestas pedagógicas y las praxis de la formación universitaria, sin descuidar la cultura y los valores de la nación y de la región.

3. La internacionalización de la educación

La internacionalización de la educación superior exige innovaciones estructurales, curriculares y formación docente, que demandan fuertes inversiones económicas. Las Universidades de nuestra región y de nuestro país requieren mayor fortalecimiento en esas innovaciones. Según la Conferencia Mundial sobre la Educación Superior (2009) la relación y cooperación internacional buscan básicamente instalar en los pueblos “la solidaridad y el respeto mutuo”, “la promoción de los valores del humanismo y el diálogo intercultural”; la contribución en el fortalecimiento de “la comprensión mutua de la cultura de paz” (art. 24 y 26). Aquí se establecen los fines de la internacionalización y no se mencionan el modo de realización. A continuación manifestamos algunos rasgos de la internacionalización: la movilidad estudiantil y de docentes entre los países, emprendimiento conjunto de proyectos de investigación, los diseños de programas de estudios especiales, un sistema de crédito compartido con otras universidades, promoción del desarrollo de las competencias lingüísticas de los actores[1].

4. Calidad de educación

La calidad es una cualidad que se constituye un gran reto para las universidades de nuestra región y de nuestro país. En este sentido cabe mencionar que la UNESCO promueve la mayor cobertura posible de la Educación Superior. Esto significa que la Educación Superior debe llegar a la mayor cantidad de personas posibles; sin embargo, esa cobertura debe estar asegurada por la calidad de la educación. El contenido de esa calidad se describe claramente en el número 89 del Documento de Políticas para el Cambio y el Desarrollo en la Educación Superior (1995):
           
La calidad de la educación superior es un concepto Multidimensional (…). La calidad se refiere en este caso a todas sus funciones y actividades principales: calidad de la enseñanza, de la formación y la investigación, lo que significa calidad del personal y de los programas, y calidad del aprendizaje, como corolario de la enseñanza y la investigación.

La falta de un aseguramiento mínimo de la calidad educativa es un mal, que corroe a la sociedad, porque arroja al mercado profesionales ineptos, cuyas praxis van en perjuicio de la misma. Esta calidad debe reflejarse en las dimensiones sustantivas: Gestión, Investigación, Docencia y Extensión.

5. Pertinencia de los programas de estudios

Los programas formativos de las universidades no siempre responden a las necesidades reales de la sociedad. En el país se puede notar la falta de pertinencia de ofertas educativas. Paraguay es un país eminentemente agro-pecuario, pero las carreras, que respondan a esa realidad, son pocas y no son debidamente promovidas. Las universidades deben analizar y rever sus ofertas educativas. También cabe mencionar que las 54 universidades existentes en el país comparten determinadas carreras tradicionales y cada año egresan miles de profesionales, quienes no siempre ejercen su profesión, debido a la mala formación o la misma superpoblación. El Documento citado precedentemente de la UNESCO en el número 50 describe los contenidos esenciales de la pertinencia educativa:

La pertinencia debe pues abarcar cuestiones como la democratización del acceso y mayores oportunidades de participación en la educación superior durante las distintas fases de la vida, los vínculos con el mundo del trabajo y las responsabilidades de la educación superior con respecto al sistema educativo en su conjunto.

Una de las formas de democratización o apertura a la participación es la atención al contexto sociocultural. En el contexto paraguayo es necesario profundizar en los estudios de las lenguas oficiales, el guaraní y el español, pero también defender y promover la cultura y lenguas de los pueblos aborígenes existentes en el país. 

6. Ética

La cobertura a la Educación Superior, que viene impulsada por la UNESCO, propicia la creación de universidades. En el Paraguay se ha cumplido con esto. Sin embargo, las nuevas universidades se instalan dentro del subsistema de la Educación Superior y funcionan con precaria infraestructura y con una escasa organización. La improvisación, la precariedad y la idea de mercantilización de la educación propenden la corrupción. Ésta, en nuestro país, no sólo afecta a las universidades emergentes (públicas y privadas), sino también a las confesionales. En estas universidades se dan desde ventas de puntajes de exámenes, ventas de notas, ventas de títulos hasta nepotismo institucional. Ante esta situación es necesario impulsar no sólo un sistema de Evaluación de la Calidad Educativa de las Instituciones de Educación Superior, sino, sobre todo, promover códigos de ética para paliar la corrupción.

La corrupción es un mal que afecta a toda sociedad y permea todo el tejido social. Las Instituciones de Educación Superior son tales en cuanto estén abiertas y sensibles a las imponentes problemáticas de la sociedad y en la medida que busquen soluciones a las mismas. La corrupción debe ser combatida por las universidades y estas mismas deben marcar la diferencia y para marcar la diferencia deben fundarse sobre principios éticos, no sobre el mero principio de oportunidades del mercado. Las universidades deben incomodar a la corrupción, no que aquellas se acomoden a ésta.         

7. Impacto de las –TIC’s y de los Mood

Las TIC’s  son fenómenos propios de la globalización y de la creciente evolución de la ciencias y de las técnicas. El soporte de la sociedad de la Información y la Comunicación es la tecnología. La evolución de las técnicas de la computación y la informática y las telefonías celulares han producido en un corto tiempo una profunda transformación social-global. Estos instrumentos tecnológicos son tan importantes, que se constituyen como inherentes a la vida individual y colectiva.  ¿Cómo se afronta este fenómeno en las universidades? No de buena manera, puesto que existen pocos profesionales del área y no dan abasto. La gran mayoría de los docentes universitarios aún no sabe manejar las herramientas tecnológicas y debe desarrollar sus actividades educativas ante estudiantes nativos de las TIC’s. Hay una gran desproporción en el dominio del uso de las tecnologías entre docente y estudiantes, que las universidades deben no sólo comprender, sino afrontarlos con políticas educativas claras.

Mood es una sigla inglesa que corresponde a las siguientes palabras: Massive Open Online Course. La sociedad del conocimiento, en la que nos encontramos, es una sociedad virtual, a través de la cual se proporciona cursos, carreras y títulos. Un estudiante con condiciones puede desde cualquier parte del mundo matricularse en algunas universidades más prestigiosas del mundo y graduarse debidamente. Las universidades de nuestro país aún están debatiendo las posibilidades de realización e, incluso, la validez de los cursos virtuales. Aparte de esto, los desafíos inmediatos en esta área son la poca frecuencia de intensidad de la banda ancha, faltas de capacitación de docentes-tecnólogos, que puedan apropiarse de la didáctica propia de la educación virtual, la falta de políticas institucionales respecto a los cursos virtuales. 

Ante este diagnóstico, las universidades tienen un gran desafío de establecer políticas públicas relacionadas con esta modalidad emergente.

8. Autonomía de la Universidad

La autonomía es un atributo esencial de las universidades. Ella les proporciona la libre gobernanza y la responsable administración pedagógica y administrativa con vista a determinar su misión. Ahora bien, la autonomía universitaria no siempre viene bien comprendida; en nombre de ella se cometen abusos de índole pedagógica y administrativa. Ej. Se ofrecen carreras sin las debidas habilitaciones; se desarrollan cursos sin contar con una mínima infraestructura, se lanzan al mercado o a la sociedad “profesionales” sin asegurarles competencias mínimas de profesionalidad; evidencias de la ausencia de la ética y  la presencia de actuaciones inescrupulosas de algunos miembros de las altas gerencias universitarias. Ante esta situación surge el desafío de definir controles para asegurar una educación básica de calidad. 

9. Liderazgo y Emprendedorismo

Las universidades en nuestra región, especialmente en nuestro país, presentan ofertas educativas similares. No existe una distinción particular en un área o más áreas del saber. Esta situación manifiesta una especie de homogeneidad tanto en la calidad educativa como también en las ofertas educativas.

Las Universidades, ante esta coyuntura necesitan especializarse y destacarse en una o más áreas del saber, lo cual  requiere aptitudes emprendedoras.

10. Formación profesional

La calidad educativa no pasa solamente por el aggiornamento o/y la innovación de los programas de estudios, sino también y fundamentalmente en la inversión de la formación docente. Si el Estado o las instituciones educativas descuidan la adecuada y suficiente formación docente, entonces se transluce intención de mantener el status quo de la educación en el País, vale decir que no existe voluntad política para elevar la calidad educativa. Los docentes están descuidados. No tienen buena remuneración y a raíz de eso migran de una universidad a otra para sobrevivir. Estando así, no les resta tiempo para su formación continua. Muchos docentes no están preparados para desarrollar con sapiencia y pericia sus cátedras. La repercusión inmediata recae sobre los estudiantes. 

Lic. Abelardo Montiel


Referencias bibliográficas
- Gacel-Ávila. J. La educación terciaria en América Latina. El concepto de internacionalización comprehensiva. En Internacionalización de la Educación Superior a Nivel Mundial y Regionalización. Principales tendencias y desafíos. Planeta. Bogotá. 2012.
- Documento de Políticas para el Cambio y el Desarrollo en la Educación Superior. UNESCO. París.1995.
-Tünnermann Bernheim C. La Educación Superior en el Umbral del Siglo XXI. IESALC-UNESCO. Carácas. 1998.




[1] Cfr. Gacel-Ávila. J. La educación terciaria en América Latina. El concepto de internacionalización comprehensiva. P. 132-139.